Cómo afecta una recesión a los mercados financieros

Cómo afecta una recesión económica a los mercados financieros

¿Sabías que algunas personas ganan dinero cuando todo parece estar en crisis? Es más, hay traders que esperan con ansias las recesiones. Suena raro, ¿verdad? Pero es real. Cuando escuchas en las noticias que hay una recesión, la mayoría entra en pánico. Sin embargo, quienes entienden el trading y los mercados financieros saben que es un momento clave. ¿Por qué? ¿Qué cambia en una recesión? ¿Y cómo puedes prepararte incluso si apenas estás empezando?

Tabla de Contenidos

Aquí te lo contamos todo. Prepárate para descubrir cómo una recesión afecta a las bolsas, las materias primas, las criptomonedas y hasta tus ahorros. Pero sobre todo, aprenderás qué hacen los traders profesionales y cómo puedes empezar a pensar como uno, incluso si todavía no te has apuntado a ningún curso o academia.

Qué es una recesión económica: explicándolo sin tecnicismos

Imagina que la economía de un país es como una bicicleta. Mientras alguien pedalea con fuerza, todo avanza: se crean empleos, las empresas ganan dinero, las familias consumen, los bancos prestan y la gente invierte. Pero si de repente el ciclista deja de pedalear o empieza a frenar, esa bicicleta va perdiendo velocidad… hasta que se para. Eso es, en pocas palabras, lo que pasa durante una recesión.

Una recesión económica ocurre cuando la actividad económica de un país o una región disminuye durante al menos dos trimestres consecutivos. Es decir, durante seis meses seguidos hay menos producción, menos ventas, menos empleo y menos consumo.

Pero no es solo una cuestión de números. Una recesión se nota en la calle:

  • Cierran tiendas.

  • Suben los despidos.

  • Baja el consumo.

  • Aumenta la desconfianza.

  • Se frenan las inversiones.

Lo interesante es que una recesión no suele llegar de golpe, como una tormenta que aparece sin aviso. Viene acompañada de señales. Algunos de estos avisos pueden ser:

  • La inflación se dispara y los precios suben demasiado rápido.

  • Los bancos centrales suben los tipos de interés para frenarla.

  • El crédito se encarece y las empresas dejan de invertir.

  • Las familias reducen su gasto porque todo está más caro.

En conjunto, todo esto crea un círculo vicioso. Como se vende menos, se produce menos. Como se produce menos, se necesita menos personal. Como hay menos empleo, se consume aún menos… y así sucesivamente.

¿Y por qué nos importa esto en el mundo del trading? Porque los mercados financieros están muy conectados con lo que pasa en la economía real. Cuando una recesión asoma, los mercados reaccionan de forma inmediata. Pero lo hacen con lógica: anticipan, se ajustan y buscan nuevas oportunidades. Saber leer estas señales es una de las grandes habilidades que desarrolla cualquier trader profesional o alguien que estudia en una buena academia de trading.

Cómo reacciona la bolsa ante una recesión

La bolsa, como el espejo retrovisor de un coche, no refleja el presente. Refleja las expectativas. Es decir, los precios de las acciones no reaccionan necesariamente a lo que está pasando hoy, sino a lo que los inversores creen que va a pasar mañana.

Y aquí viene una de las grandes sorpresas para quienes están empezando en el mundo del trading: la bolsa suele caer antes de que empiece una recesión, y muchas veces empieza a subir antes de que acabe.

Vamos por fases para entender cómo se comporta el mercado bursátil en estos ciclos:

Fase 1: Anticipación y corrección

Cuando aparecen los primeros indicios de desaceleración —por ejemplo, caídas en las ventas, advertencias de resultados negativos por parte de empresas grandes o subidas agresivas de tipos por parte del banco central—, los mercados suelen reaccionar rápido.

Los inversores institucionales y grandes fondos no esperan confirmaciones. Venden acciones para protegerse y eso arrastra a otros inversores. Esta venta masiva genera un efecto dominó. En esta etapa, se habla de “corrección del mercado”.

Fase 2: Venta masiva y pánico

Si los datos económicos siguen empeorando y se confirma oficialmente que el país ha entrado en recesión, se desata lo que se conoce como una “fase de capitulación”.

Aquí la venta es emocional: todo el mundo quiere salir del mercado. Incluso los que no han perdido mucho hasta ahora venden por miedo a perderlo todo. Las noticias son pesimistas, se habla de crisis, desempleo, quiebras… y el miedo lo domina todo.

Pero este miedo también crea oportunidades. Los precios de las acciones caen tanto que algunas buenas empresas terminan cotizando a precios muy bajos, sin que haya cambiado su modelo de negocio.

Fase 3: Estabilización y acumulación

Después de la fase más dura, el mercado empieza a buscar una base. A veces cae más lentamente, otras veces lateraliza, y poco a poco empieza a aparecer la confianza. En esta etapa, los inversores más experimentados y los traders profesionales comienzan a comprar poco a poco.

Los sectores defensivos (salud, alimentación, servicios públicos) suelen comportarse mejor, mientras que los sectores cíclicos (lujo, tecnología, automoción) tardan más en recuperarse.

Aquí también se activa una estrategia muy usada en el mundo del trading: la acumulación. Consiste en comprar gradualmente activos que se consideran sólidos, anticipando su futura subida.

Fase 4: Recuperación

Antes de que los datos económicos oficiales mejoren, el mercado suele adelantarse. Las bolsas comienzan a subir de nuevo, los resultados empresariales mejoran, se generan expectativas positivas, y el ciclo vuelve a comenzar.

¿Qué podemos aprender de todo esto?

Que el mercado no se mueve por emociones, sino por expectativas. Y que quienes se forman en trading aprenden a aprovechar tanto las subidas como las bajadas, utilizando herramientas como:

  • Análisis técnico, para identificar puntos de entrada y salida.

  • Gestión del riesgo, para evitar grandes pérdidas.

  • Psicología del trading, para no dejarse llevar por el pánico colectivo.

Qué pasa con las criptomonedas en una recesión

Las criptomonedas como Bitcoin, Ethereum o Solana han sido presentadas muchas veces como activos “independientes” del sistema financiero tradicional. Pero cuando llega una recesión… ¿realmente se comportan de forma distinta a las acciones o los bonos?

La realidad es que su comportamiento depende mucho del momento del mercado y del nivel de adopción.

Fase 1: Caída inicial por miedo

Cuando el pánico se apodera del sistema financiero, incluso los activos más disruptivos como las criptomonedas sufren. ¿Por qué?

Porque muchos inversores retiran liquidez de todos los mercados para tener dinero disponible. Venden sus activos, incluso los que creen que son el futuro, para tener efectivo. Esto arrastra a las criptos a fuertes caídas.

Ejemplo claro: durante los primeros meses de la pandemia en 2020, Bitcoin cayó más de un 40% en cuestión de días. Lo mismo ocurrió con la mayoría de criptomonedas principales.

Fase 2: Recuperación parcial o especulativa

Después del shock inicial, si los gobiernos y bancos centrales empiezan a inyectar dinero o bajan tipos de interés, algunos inversores vuelven a entrar en criptomonedas buscando rentabilidad rápida.

Aquí se abre una ventana especulativa: la liquidez barata suele beneficiar a activos de alto riesgo, entre ellos, las criptos.

Durante este periodo, los traders que operan con apalancamiento encuentran oportunidades tanto para largos como para cortos. Las plataformas de trading de criptomonedas permiten operar con derivados y márgenes, lo cual requiere conocimiento y estrategia para evitar liquidaciones.

Fase 3: Criptomonedas como refugio… ¿mito o realidad?

Existe una teoría que dice que Bitcoin es el “oro digital” y que, a largo plazo, puede funcionar como un refugio contra la inflación o la devaluación de monedas fiat.

En algunos países con inflación galopante (como Argentina o Venezuela), esto se ha observado de manera parcial. Sin embargo, a nivel global, el comportamiento de Bitcoin sigue siendo más volátil que el del oro o los bonos del Estado.

¿Puede actuar como refugio? Sí, pero aún no es totalmente estable ni está plenamente aceptado como tal. Por eso es importante entender su papel según el tipo de recesión y el contexto geopolítico.

Cómo afecta una recesión al mercado de divisas (forex)

El mercado de divisas, conocido como Forex (abreviatura de Foreign Exchange), es el mercado financiero más grande del mundo. Cada día, se mueven billones de dólares en él. Y aunque a simple vista parezca ajeno a una recesión, la realidad es que es uno de los primeros en reaccionar cuando la economía se tambalea.

¿Por qué? Porque las divisas representan la fortaleza (o debilidad) de un país. Y cuando ese país entra en recesión, su moneda también lo sufre.

Cómo funciona la relación entre economía y divisa

Cuando un país entra en recesión, hay varios factores que influyen directamente en el valor de su moneda:

  1. Tipos de interés:
    Los bancos centrales, como el BCE o la Reserva Federal, suelen bajar los tipos de interés en tiempos de recesión. Esto hace que el rendimiento de esa moneda sea menor, por lo que los inversores la venden.
    Por ejemplo, si el dólar estadounidense ofrece un 5% de interés y el euro un 1%, los inversores preferirán dólares. Pero si la Fed baja los tipos al 2%, ese atractivo desaparece.

  2. Huida de capitales:
    Si un país entra en crisis profunda, muchos inversores sacan su dinero para llevarlo a economías más estables. Esto provoca una caída aún mayor de su divisa.

  3. Pérdida de confianza:
    La percepción lo es todo en el trading de divisas. Si los traders creen que un país no va a poder recuperarse pronto, su moneda será castigada, aunque los datos económicos aún no sean catastróficos.

Cómo lo aprovechan los traders

Los traders de Forex viven de los movimientos entre pares de divisas. Por eso, una recesión puede ser una mina de oportunidades. Algunos ejemplos de estrategias:

  • Operar el par EUR/USD cuando la Fed o el BCE anuncian cambios de política monetaria.

  • Buscar refugio en monedas fuertes, como el dólar estadounidense (USD), el yen japonés (JPY) o el franco suizo (CHF).

  • Aprovechar la volatilidad en monedas de países emergentes, que suelen sufrir más en recesiones (como el peso argentino o la lira turca).

Además, las plataformas de Forex permiten operar con apalancamiento, lo que aumenta tanto las oportunidades como los riesgos. Por eso, es esencial formarse bien, hacer simulaciones y practicar con cuentas demo antes de operar en real. Las academias especializadas en trading enseñan precisamente esto: cómo leer el mercado, cómo usar herramientas como el calendario económico, y cómo evitar errores comunes que llevan a pérdidas innecesarias.

Qué pasa con los bonos y la renta fija

Cuando la palabra “crisis” aparece en los titulares, muchos inversores buscan seguridad. Y ahí es donde entran los bonosy otros activos de renta fija. En teoría, estos productos financieros ofrecen una rentabilidad estable y menor riesgo. Pero… ¿realmente son siempre seguros en una recesión?

Qué son los bonos y por qué se consideran “seguros”

Un bono es básicamente un préstamo. Cuando compras un bono, le estás prestando dinero a un gobierno o a una empresa, que se compromete a devolverte el dinero en una fecha concreta y a pagarte intereses periódicos. Por ejemplo:

  • Un bono del Estado español a 10 años te pagará un interés anual fijo durante una década.

  • Un bono corporativo emitido por una gran empresa hará lo mismo, pero con más riesgo.

En épocas de recesión, los bonos soberanos de países estables (como Alemania, EE. UU., Suiza o Japón) se convierten en refugios naturales. La razón es sencilla: aunque el rendimiento que ofrecen no sea muy alto, la posibilidad de impago es casi nula.

Qué ocurre durante una recesión

  1. Aumento de la demanda de bonos seguros:
    Los inversores huyen de la renta variable (acciones) y buscan activos más previsibles. Eso hace que el precio de los bonos suba.

  2. Caída de los rendimientos:
    Cuando sube el precio de un bono, su rentabilidad baja. Así que si entras tarde, puedes acabar comprando un bono que paga muy poco.

  3. Problemas con los bonos corporativos o de alto riesgo (High Yield):
    No todos los bonos son iguales. Los bonos emitidos por empresas que no tienen mucha solvencia (los llamados “bonos basura”) pueden desplomarse si se piensa que esa empresa podría quebrar. En este caso, la renta fija deja de ser segura.

  4. Impacto de la inflación:
    Si una recesión va acompañada de inflación (como ocurrió en 2022), los bonos a largo plazo pierden atractivo, porque el dinero que te devuelven en el futuro valdrá menos.

¿Cómo se posiciona un trader ante los bonos?

Aunque tradicionalmente los bonos se consideran productos de inversión pasiva, muchos traders profesionales operan con ETFs de renta fija, contratos de futuros sobre bonos o incluso productos derivados. En tiempos de recesión, estos instrumentos permiten:

  • Cubrir carteras de acciones.

  • Apostar a la caída de tipos de interés.

  • Aprovechar diferenciales entre bonos de distintos países.

Si estás empezando, puede parecerte complejo, pero en un curso avanzado de trading aprenderás cómo usar estos instrumentos para gestionar el riesgo y diversificar tu operativa.

El oro y otros refugios tradicionales

Cuando todo cae, hay un activo que suele brillar más que nunca: el oro. A lo largo de la historia, el oro ha sido considerado un refugio seguro en épocas de crisis económicas, conflictos bélicos y colapsos monetarios. Pero… ¿sigue siendo así hoy en día?

¿Por qué el oro es un refugio?

El oro tiene varias características que lo hacen especial:

  • No depende de gobiernos ni bancos centrales.

  • Es escaso y no se puede crear de la nada (a diferencia del dinero fiat).

  • Tiene valor reconocido en todo el mundo desde hace miles de años.

  • Se utiliza también en joyería e industria, lo que le da una demanda adicional.

Durante una recesión, especialmente si hay miedo a la inflación o a la devaluación de las monedas, muchos inversores huyen al oro para proteger su capital.

Cómo se comporta el oro en una recesión

  • Si la recesión viene con inflación: el oro suele subir.

  • Si la recesión viene con deflación o tipos altos: puede estancarse o incluso caer temporalmente.

  • Si hay miedo generalizado en los mercados, el oro se convierte en un activo estrella.

Por ejemplo, en la crisis financiera de 2008, el oro pasó de valer unos 700 dólares la onza a superar los 1.900 dólares en apenas tres años.

Otros activos considerados refugio

Aunque el oro es el más famoso, hay otros activos que los inversores buscan cuando la incertidumbre reina:

  • Franco suizo (CHF): moneda considerada extremadamente estable.

  • Yen japonés (JPY): tradicionalmente utilizado como refugio en Asia.

  • Dólar estadounidense (USD): a pesar de su deuda, sigue siendo la moneda más usada y segura del mundo.

  • Bonos del Tesoro de EE. UU.: se consideran casi libres de riesgo de impago.

Incluso hay fondos cotizados (ETFs) que replican el comportamiento del oro o de cestas de activos refugio. Esto permite a los traders minoristas acceder fácilmente a estos productos desde su plataforma de inversión habitual, sin tener que comprar oro físico.

Cómo lo aprovechan los traders

  • Usan el oro para diversificar carteras en tiempos de alta volatilidad.

  • Aplican estrategias de cobertura en criptomonedas o acciones, comprando oro para equilibrar el riesgo.

  • Operan con contratos de futuros sobre el oro o con ETFs apalancados para maximizar beneficios en momentos de pánico bursátil.

Cómo se preparan los traders ante una recesión

Uno de los mayores errores de los principiantes en trading es pensar que los traders profesionales solo ganan cuando los mercados suben. La realidad es muy distinta: los traders bien formados se preparan para actuar en cualquier dirección del mercado, y una recesión no es una excepción. De hecho, algunos traders esperan esos momentos con especial atención, porque la volatilidad que traen las recesiones abre muchas oportunidades.

¿Qué hace un trader experimentado cuando ve venir una recesión?

Primero, cambia su mentalidad. Deja de pensar en comprar barato para vender caro, y empieza a analizar la situación como un estratega. No se deja llevar por las emociones, ni por los titulares de los medios.

Aquí algunas de las formas más comunes de preparación:

1. Revisión y ajuste de cartera

Los traders revisan todos los activos que tienen y evalúan su riesgo individual. Si tienen muchas posiciones en sectores cíclicos (como turismo, tecnología o construcción), probablemente reduzcan su exposición o se pasen a sectores más defensivos como:

  • Consumo básico (alimentación, limpieza)

  • Farmacéuticas y salud

  • Energía básica (electricidad, agua)

No se trata de dejar de operar, sino de adaptar las decisiones al nuevo contexto.

2. Estrategias de cobertura

Muchos traders aplican hedging o cobertura para proteger sus inversiones. Esto puede incluir:

  • Compra de opciones put (que suben cuando baja el activo).

  • Venta en corto de índices bursátiles.

  • Compra de activos refugio como el oro o bonos estadounidenses.

Estas coberturas actúan como un “seguro” que limita las pérdidas si el mercado se desploma.

3. Aumento de liquidez

Durante una recesión, muchos traders prefieren tener una mayor parte de su cartera en liquidez. ¿Por qué?

  • Les permite entrar en oportunidades cuando los precios caen más.

  • Reduce el riesgo de estar sobreexpuestos.

  • Da margen para reaccionar rápidamente ante noticias imprevistas.

Un trader profesional sabe que no operar también es una decisión de trading.

4. Cambio de horizonte temporal

Mientras que en épocas estables muchos traders se enfocan en estrategias de largo plazo, en recesión muchos acortan sus horizontes:

  • Operaciones intradía o de pocos días.

  • Más análisis técnico que fundamental.

  • Uso intensivo de indicadores de volatilidad y volumen.

Todo esto se aprende practicando y, sobre todo, formándose. Las academias de trading enseñan a interpretar el contexto económico para adaptar tus estrategias sin improvisar.

Cómo detectar una recesión

Indicadores clave para detectar una recesión

Las recesiones no aparecen de repente. Se van formando con el tiempo, y los mercados financieros (y los traders informados) saben leer esas señales. Para un trader, estar atento a ciertos indicadores económicos clave es fundamental para adelantarse a los movimientos del mercado.

A continuación, te explicamos los más importantes, sin tecnicismos y con ejemplos claros.

1. Producto Interior Bruto (PIB)

El PIB mide la riqueza que genera un país en un periodo determinado. Si durante dos trimestres consecutivos el PIB cae, oficialmente hay recesión.

Como trader, no necesitas esperar a que se confirme. Si los informes anticipados ya muestran caída de actividad, es una señal clara de alerta.

2. Tasa de desempleo

El empleo es uno de los primeros indicadores sociales que refleja una crisis económica. Si las empresas no venden, despiden. Y si hay más paro, se consume menos, creando un círculo vicioso.

Un aumento rápido del desempleo suele anticipar o confirmar que algo va mal en la economía.

3. Índice de confianza del consumidor

Este índice refleja cómo se siente la gente respecto a su situación financiera y la del país. Si baja, la gente ahorra más y gasta menos. Esto afecta directamente a las empresas, sus beneficios y, por tanto, sus acciones.

Un trader atento observa estos datos para anticipar cambios de tendencia en sectores sensibles al consumo, como el comercio minorista, el turismo o el automóvil.

4. Curva de tipos invertida

Es uno de los indicadores más fiables para detectar recesiones futuras. La curva de tipos representa la diferencia entre los tipos de interés a corto y largo plazo. Cuando los tipos a corto plazo son más altos que los de largo, se dice que la curva está “invertida”.

Esto suele significar que los inversores desconfían del futuro económico. Y lo más importante: históricamente, una curva invertida ha precedido a la mayoría de recesiones en EE. UU. desde la Segunda Guerra Mundial.

5. Producción industrial y ventas minoristas

Cuando la economía se enfría, la industria reduce su actividad. También se vende menos en tiendas, supermercados y comercios en general.

Estos indicadores son muy útiles para detectar cambios reales en la economía antes de que lo diga el PIB o lo confirmen los políticos.

Qué enseñan las academias de trading sobre recesiones

Las academias de trading serias no solo te enseñan a leer velas, usar indicadores o calcular ratios. También te enseñan a entender el contexto macroeconómico, y las recesiones son uno de los escenarios más importantes que todo trader debe aprender a navegar.

¿Por qué es tan importante saber actuar en recesión?

Porque los mercados no siempre suben. Y cuando bajan, no significa que debas parar. Significa que debes adaptar tu enfoque.

Una buena formación te enseña a:

  • Entender cómo afectan los ciclos económicos a los distintos activos (acciones, divisas, bonos, criptos).

  • Detectar señales tempranas de recesión en los datos macroeconómicos.

  • Identificar sectores defensivos y activos refugio que suelen comportarse mejor.

  • Aplicar estrategias específicas para mercados bajistas, como los cortos, coberturas o rotación sectorial.

  • Mantener la disciplina emocional cuando todo el mundo está en modo pánico.

Qué incluyen los mejores cursos de trading respecto a recesiones

  1. Módulos de análisis fundamental
    Para interpretar los datos macro que anticipan cambios en el mercado. Aprendes a leer informes del BCE, Fed, y conocer qué esperar de decisiones como la subida de tipos o impresión de dinero.

  2. Gestión del riesgo en entornos volátiles
    Las recesiones disparan la volatilidad. Los cursos enseñan cómo ajustar el tamaño de posición, usar stop loss más amplios o reducir apalancamiento.

  3. Simulaciones de crisis reales
    Algunos cursos avanzados incluyen simulaciones con datos reales de crisis pasadas como 2008 o 2020. Esto permite practicar cómo habría actuado un trader en esos escenarios.

  4. Psicología del trading en tiempos difíciles
    Aprender a gestionar el miedo, evitar decisiones impulsivas y mantener la calma en mercados bajistas es parte fundamental de cualquier formación seria.

  5. Adaptación de estrategias por contexto
    Un sistema que funciona en mercado alcista puede fallar estrepitosamente en recesión. Las academias enseñan cómo modificar tus estrategias o combinarlas según el momento del ciclo económico.

Lo que no debes hacer en una recesión si te interesa el trading

  • Entrar al mercado sin estrategia.

  • Invertir con emociones.

  • Dejarte llevar por el miedo.

  • Creer que todo está barato solo porque ha caído.

  • Copiar a otros traders sin saber por qué hacen lo que hacen.

Recuerda: los traders profesionales no improvisan. Tienen un plan, lo ejecutan y lo ajustan según el contexto económico.

¿Qué oportunidades surgen para un trader durante una recesión?

Aunque parezca contradictorio, las recesiones generan muchas oportunidades:

  • Acciones de calidad a precios bajos.

  • Alta volatilidad: ideal para estrategias de corto plazo.

  • Grandes movimientos en divisas.

  • Criptomonedas en zonas de acumulación.

  • Posiciones cortas que permiten ganar cuando el mercado cae.

Pero para ver estas oportunidades, necesitas educación, práctica y calma.

El papel de la psicología del trader en tiempos de crisis

La recesión no solo pone a prueba tu conocimiento. También tu cabeza.

  • ¿Eres capaz de mantener la calma en plena tormenta?

  • ¿Sabes cuándo parar y no operar?

  • ¿Puedes evitar el “FOMO” o miedo a perderte una oportunidad?

La psicología es uno de los pilares que se trabajan en las mejores academias de trading. Porque sin ella, ni la mejor estrategia del mundo sirve.

Cómo empezar si aún no eres trader pero te interesa aprender

Si has llegado hasta aquí es porque algo te llama la atención. Tal vez no te ves aún operando, pero sí quieres entender más, aprender, prepararte…

Aquí tienes algunos pasos:

  1. Infórmate con contenido gratuito: blogs, vídeos, artículos como este.

  2. Sigue a traders expertos, pero no para copiar, sino para entender su lógica.

  3. Apúntate a un curso básico en una academia seria. Que te explique los fundamentos sin humo.

  4. Practica con una cuenta demo.

  5. Haz preguntas, mucha autocrítica y ten paciencia.

Recuerda: el trading no es para hacerte rico rápido. Es una disciplina que, bien aprendida, puede darte muchas satisfacciones… incluso en recesión.

Preguntas frecuentes (FAQs)

¿Una recesión siempre hace que la bolsa baje?
No siempre. A veces, los mercados ya han descontado la recesión antes de que se confirme, y empiezan a subir cuando los datos aún son malos.

¿Es buen momento para aprender trading si viene una recesión?
Sí. De hecho, es uno de los mejores momentos para aprender cómo reaccionan los mercados ante eventos reales.

¿Qué hacen los traders en una recesión?
Analizan, esperan oportunidades y adaptan sus estrategias. Algunos operan a corto, otros buscan activos refugio o acumulan posiciones a largo plazo.

¿Hay sectores que resisten mejor en recesión?
Sí. Alimentación, salud, energía básica y servicios esenciales suelen tener un comportamiento más estable.

¿Es necesario tener mucho dinero para empezar en el trading en una recesión?
No. Hoy puedes practicar con cuentas demo o empezar con cantidades pequeñas mientras aprendes.